jueves, 3 de febrero de 2011

Protestan jornaleros guatemaltecos ante la Organización Internacional de las Migraciones


Gabriela Coutiño
Tuxtla Gutiérrez, Chis. 2 Febrero.- Un grupo de jornaleros agrícolas de Guatemala protestaron hoy, en Tapachula, arrojando huevos y plátanos verdes a las oficinas de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) y consulado de su país, en exigencia de indemnización luego de que autoridades los sacaron de una finca donde trabajaban porque supuestamente eran víctimas de explotación laboral.
Los campesinos, hombres y mujeres con pancartas demandaron la intervención del presidente de su país, Alvaro Colón y de México, Felipe Calderón, para que sean indemnizados por 18 dias que perdieron de trabajo al ser retenidos en instalaciones del Instituto Nacional de Migración.
“Ya se presentó una queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos por los abusos que sufrieron al ser sacados por la fuerza de la finca platanera donde laboraban en noviembre pasado, por funcionarios de la Fiscalía Especial para la Violencia cometida contra las Mujeres y la Trata de Personas que creyeron que estaban siendo víctimas de trata”, informó el abogado defensor Victor Hugo Martínez.
Cuando fueron sacados de la finca ubicada en los límites entre México y Guatemala, los campesinos guatemaltecos fueron trasladados encerrados en un trailer termoking hasta las oficinas de la Procuraduría General de la República y luego encerrados en el centro de reclusión de migración por 18 dias, relató el abogado.
“Además de estar privados de su libertad en contra de su voluntad perdieron 18 días de trabajo por lo que exigen ser indemnizados”, indicó el defensor.
En noviembre pasado personal de la Armada de México, y de la Procuraduría General de la República irrumpieron en la finca bananera La Herradura ubicada entre los ejidos Miguel Alemán y La Libertad en el municipio de Suchiate, llevandose a los campesinos guatemaltecos y a sus familias, entregandolos a la estación migratoria Siglo XXI, de Tapachula.
Victor HugoMartínez señala que los jornaleros guatemaltecos permanecieron 18 dias en las instalaciones del Instituto Nacional de Migración con el argumento de que habían sido rescatados porque eran víctimas de explotación laboral, pero ellos afirman que se encontraban trabajando por voluntad propia.
“Ahora la fiscalía no quiere reconocer que cometieron un error, y que no hubo ningún delito de trata de personas con fines de explotación laboral, porque prueba de ello es que las tres personas que habían sido detenidas obtuvieron su libertad por falta de pruebas”, agregó el abogado.
Martínez consideró que con esta acción las autoridades lo único que consiguieron es afectar los ingresos económicos de los humildes campesinos.

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