lunes, 27 de mayo de 2013

UNO NUNCA DEBE 
DEJAR DE 
COMUNICARSE Y 
MENOS CON LAS
 AUTORIDADES, 
PERO DEBEMOS
 HACERLO CON RESPETO

No es posible que Pueblo y Gobierno que se han comprometido trabajar de la mano, hoy esto no lo lleven a cabo, pues cuando se trata de solicitar los apoyos y más que nada aún las atenciones como son prestaciones de los servicios que el pueblo requiere, se haga de forma abusiva, exigente y grosera. Esto nada más suele provocar el desdén del Funcionario que tiene el poder. Ya se dice: “que en la manera que me pides es la manera que te daré”. Hay quienes recurren a presiones, a manifestaciones, a paros, a críticas destructivas; otros tantos adoptan otra postura sin que logren el objetivo primordial, pero a fin de cuentas, ¿Qué se puede esperar si las dos partes se comportan en este caso con rebeldía? Solo se puede esperar la negativa del funcionario, a los deseos de ver logradas las soluciones de las necesidades del pueblo, este que nombra a su representante pidiendo que sea él, que con su intervención pueda hacer las gestiones y lograr solucionar los problemas que aquejan, pero este no lo hace con respeto y educación sino que trata de imponerse, sin entender que a los que representa, han confiado en él. La autoridad merece respeto y no la falta de decencia con la que se trata de exigir las atenciones de nuestras leyes, por lo que debemos ver la otra cara de la moneda y preguntarnos ¿Cómo me gustaría a mí, que me pidieran las cosas? Ya lo pensé antes y debo valorar que solo con paciencia, se va lograr para aquellos que acepte ser su representante y que las solicitudes de servicio se deben llevar a cabo de manera respetuosa y así ser atendidos para mejorar nuestros estilos de vida. Amable conciudadano de veras demos a nuestra imagen y postura para los que nos observan vean lo que somos y no lo que queremos ser, que no piensen que con apego a las buenas costumbres y sentimientos lograremos llevar a los más necesitados lo que en realidad esperan de nosotros. Esto puede ser motivo de reflexión, o quizá seguir usando las presentes actitudes y decisiones o aún empeorarlas, pero una cosa si digo: todo aquel que lea estas líneas las cuales escribo con respeto y decencia, que es para el pueblo que se debe trabajar con ahínco y valorar si en realidad están en espera de lo que solicitan, desde esta página envío un cordial saludo y una sugerencia, que pensemos antes de actuar porque ya lo dice un viejo y conocido refrán: ”Con la vara que mides serás medido”. 

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